Franco Morbidelli, piloto del equipo Pramac, mostró destellos de su antiguo yo mientras luchaba con su compañero de equipo, Jorge Martín, y el vigente campeón, Pecco Bagnaia, por un podio en el GP de Alemania del pasado fin de semana.
Aunque su estrategia de jugar agresivo en los primeros compases del Gran Premio le hizo caer hasta la quinta posición en la meta, sólo hubo aspectos positivos para un piloto que está reconstruyendo su carrera tras pasar de luchar por el campeonato en 2020 a convertirse en un ocasional piloto de top-10 en MotoGP.
De hecho, los resultados de Morbidelli en los últimos años con Yamaha fueron tan decepcionantes que muchos se preguntaban cómo había conseguido hacerse con un asiento de primera con Pramac en una Ducati GP24 de fábrica.
Las críticas no eran del todo infundadas si se tiene en cuenta la facilidad con la que fue eclipsado por su compañero de equipo y campeón de 2021, Fabio Quartararo, durante su etapa juntos en el equipo oficial.
Incluso después de mostrar una importante mejora en su velocidad el año pasado con una Yamaha M1 poco potente, terminó tres puestos y 70 puntos por detrás de Quartararo en la clasificación, y sin un solo podio a su nombre. No fue de extrañar que la marca japonesa decidiera no renovar su contrato y fichar a Alex Rins, entonces en el LCR Honda.
Aunque fue una pena que Morbidelli nunca pudiera dar la vuelta a su rendimiento en Yamaha, a pesar de que el fabricante japonés lo apoyó públicamente durante mucho tiempo, al italiano se le ha dado una nueva oportunidad en Pramac y debe aprovecharla al máximo. Si la carrera de Sachsenring fue un indicador, se le puede ver cumpliendo de nuevo su promesa después de años de capa caída.
“Una versión de mí que hacía tiempo que no veíamos. Estoy contento de haber vuelto”, dijo Morbidelli sobre su actuación del domingo. “Llevo unas cuantas carreras ahí, viendo el podio y acercándome, pero ésta un poco más. ¡En un momento pensé que tenía que ganar! Así que bien. Ha sido un fin de semana positivo que todo el mundo necesitaba”.
Estaba claro que Morbidelli iba a afrontar una primera mitad de año complicada cuando un accidente mientras entrenaba en Portimao le impidió pilotar la GP24 durante los ensayos oficiales de pretemporada. Adaptarse de la M1 con la que ha corrido desde su debut en 2018 a la Desmosedici siempre iba a ser una tarea difícil, pero luego tuvo que completar la transición durante los fines de semana de carrera.
Franco Morbidelli, Pramac Racing
Foto: Gold and Goose / Motorsport Images
Pero después de sobrevivir a la locura que fue el sprint del GP de España para sumar sus primeros puntos del año, ha habido claros signos de progreso. Desde entonces, Morbidelli ha sido capaz de clasificarse y terminar entre los 10 primeros con regularidad, y una actuación como la suya en el GP de Alemania era algo que se esperaba
“Llevo tres carreras en las que siento que puedo subir al podio, desde Barcelona”, dijo. “No lo he conseguido, pero seguiré trabajando. Puedo conseguirlo. En Assen me quedé fuera de la lucha por estar entre los cinco primeros. Era un circuito difícil para nosotros, pero desde Barcelona (siento) que puedo hacerlo. “Si no puedo hacerlo (en la segunda mitad entonces) me falta algo, pero trabajaré, lo perseguiré”.
El quinto puesto de Morbidelli en Sachsenring fue su mejor resultado desde que fue cuarto en el GP de Argentina con Yamaha hace más de 12 meses, un resultado atípico si tenemos en cuenta que fue una carrera en mojado y que no logró colarse entre los seis primeros en ninguna otra carrera de 2023. Pero, si nos atenemos a su estado de forma reciente, es probable que se base en ese resultado en la segunda mitad de la temporada y regrese al podio por primera vez desde el GP de España 2021, cuando todavía pilotaba para el desaparecido equipo Petronas SRT.
“Se siente genial, se siente increíble, estar ahí en una posición tan de ataque”, dijo. “He estado allí los últimos años, sólo una vez. Pero cuando he estado allí en los dos últimos años siempre ha sido en modo defensivo, mientras que hoy (por el domingo) ha sido en modo ataque. Es mucho más bonito, mucho más mi estilo”.
La campaña de Morbidelli en 2020 con la que entonces era una Yamaha de un año de antigüedad no fue casualidad y hay auténticas razones para creer que puede ofrecer los mismos resultados, ahora que tiene una moto competitiva y un entorno sano a su alrededor.
El italiano ya ha superado al piloto del VR46 Marco Bezzecchi en la 11º posición del campeonato y ahora está en la cúspide de los 10 primeros. Con los rumores que lo vinculan con un fichaje por la escudería que dirige su mentor Valentino Rossi para sustituir a Bezzecchi, que se marchará a Aprilia, ahora es el momento de que el piloto de 29 años mejore su juego y desafíe a los otros tres pilotos equipados con la GP24.