Adelante, despacio. Ferrari salió animado de Hungría. Hay dos razones para ello: en primer lugar, la vía de desarrollo del SF-24 es la correcta; en segundo lugar, Charles Leclerc ha podido hacer una carrera sin problemas y ha dado ejemplo de sus incuestionables cualidades, recuperando una carga moral que un cuarto puesto rara vez podía dar.
Para salir de dudas: la Scuderia había marcado Hungaroring con un doble subrayado rojo, contando con que el trazado húngaro era uno de los que mejor podían adaptarse a las características del coche rojo. Las expectativas de Maranello, por tanto, pasaban por aspirar al podio, pero la distancia con McLaren y Red Bull, de momento, sigue siendo sideral, mientras que la pugna con Mercedes por el papel de tercera fuerza puede considerarse más abierta.
Detalle del fondo del Ferrari SF-24 que se utilizó en Hungría y que se volverá a ver en Spa
Foto de: Giorgio Piola
Ferrari, por tanto, no puede decir que esté satisfecha con el cuarto puesto de Leclerc y el sexto de Carlos Sainz, autor de una muy mala salida, porque sigue siendo la cuarta fuerza.
Fred Vasseur, jefe del equipo, se ha empeñado en decir que el coche rojo ha reducido a la mitad la distancia con el líder respecto al año pasado, limitando el margen a 20 segundos, pero estos números tienen poco fundamento cuando hay un McLaren que ha dado la vuelta a todos los pronósticos, superando en prestaciones al Red Bull en el mismo plazo.
La noticia positiva es que Ferrari va a Spa-Francorchamps con el fondo evolucionado con el que corrió en Budapest. La idea de volver a la configuración de Imola, como ocurrió en Silverstone, ha sido acertadamente archivada. No se vieron los saltos que se temían en Hungría, así que los trabajos en la zona inferior funcionaron, dando a los pilotos una sensación más positiva.
Se harán más retoques para Bélgica, donde el efecto del rebote será sin duda más pronunciado, pero los ingenieros de Maranello confían en que están en el buen camino para intentar volver a la senda correcta.
Ferrari SF-24: cuidar la puesta a punto es una de las claves del crecimiento del coche rojo
Foto de: Giorgio Piola
En carrera, el SF-24 mostró destellos de competitividad que sorprendieron a la propia escudería del Cavallino Rampante: los datos recogidos, sobre todo, con el juego de neumáticos duros de Leclerc fueron muy alentadores, demostrando un Ferrari que ha vuelto a sufrir una ventana demasiado estrecha en el aprovechamiento de los neumáticos. En un rango de temperaturas limitado, el coche rojo fue por breves momentos el más rápido en pista, mientras que sufría más con los medios.
El trabajo de puesta a punto en las Ardenas irá precisamente en la dirección de intentar abrir el abanico de utilización de los neumáticos: Pirelli ha elegido los tres compuestos medios de su oferta (C2, C3, C4) en una pista que ha sido reasfaltada y que es capaz de garantizar un agarre mucho mayor, con tiempos por vuelta que serán mucho más bajos que el año pasado.
Ferrari quiere llegar a las vacaciones de verano con una sonrisa, para planificar la segunda mitad del campeonato sin demasiada presión, a la espera de que Vasseur, jefe técnico, ceda este papel y anuncie el organigrama de la nueva Scuderia. Y esperamos algunas sorpresas…