La controvertida victoria Dillon en Richmond se mantiene, pero su plaza automática en los playoffs ha sido revocada por la NASCAR. Esto cuenta tanto para los playoffs de pilotos como para los de propietarios.
Joey Logano adelantó a Dillon por el liderato al comienzo del tiempo extra de dos vueltas y parecía que iba a conseguir la victoria cuando Dillon entró en la curva 3 en la última vuelta y golpeó a Logano contra el muro exterior.
Momentos después, Denny Hamlin se acercó por el interior a Dillon para disputarle el liderato, pero Dillon lo enganchó y lo llevó a él también contra el muro exterior. El piloto de Richard Childress Racing capturó entonces la bandera a cuadros. Antes de la victoria ocupaba el puesto 32 en la clasificación por puntos.
Varios pilotos condenaron la maniobra, y Hamlin pidió públicamente que le quitaran la victoria. Si Dillon vuelve a ganar, todavía puede entrar en los playoffs.
Se trata de una medida sorprendente y sin precedentes por parte del organismo sancionador. La NASCAR ya le quitó un puesto en los playoffs a Martin Truex Jr. durante la temporada 2013 tras el escándalo del ‘SpinGate’ en Richmond. Tanto a Dillon como al equipo se les han descontado 25 puntos.
También han suspendido al spotter de Dillon, Brandon Benesch, para los próximos tres eventos puntuables, hasta Darlington, el 1º de septiembre de 2024. Benesch apareció en la radio gritando “chócalo” justo antes de que Hamlin fuera enviado contra el muro exterior.
Richard Childress Racing apelará las sanciones, tras emitir la siguiente declaración: “Richard Childress Racing está muy decepcionado por la penalización de NASCAR contra el equipo Nº 3. No estamos de acuerdo con la decisión que se tomó y planeamos apelar”.
Joey Logano, Equipo Penske, Ford Mustang
Foto: NASCAR Media
Logano se enfureció después de que Dillon lo chocara intencionadamente, despotricando contra el piloto de RCR en las entrevistas posteriores a la carrera. Antes de eso, fue a los pits e hizo un burn out delante del puesto del Nº 3.
Varias personas, incluidos miembros de la familia Dillon, tuvieron que apartarse rápidamente del camino del Ford Nº 22 del Team Penske. Un oficial de la NASCAR se acercó furiosamente al coche de Logano cuando éste finalmente se detuvo. Como resultado, la NASCAR ha multado a Logano con 50.000 dólares.