Jorge Martín cometió este domingo en Misano uno de esos errores que duelen, y que pueden costar caros de cara al futuro. El líder del Mundial de MotoGP iba en segunda posición de la carrera larga del Gran Premio de San Marino, por detrás de su principal rival, Pecco Bagnaia, cuando la lluvia que llevaba cayendo desde las 13:20 de la tarde empezó a arreciar sobre la pista italiana.
El de San Sebastián de los Reyes no se lo pensó dos veces y entró en boxes para cambiar de su moto de seco, con la que habían salido todos los pilotos, a la de mojado, esperando que la lluvia se intensificara, y mientras Bagnaia se quedaba en pista, líder. Pero eso no solamente no pasó, sino que con el paso de las vueltas llovió cada vez menos. Así, pronto quedó claro que la estrategia del #89 había sido errónea, lo que le llevó a detenerse otra vez para cambiar a la moto de seco y salir a pista en 15ª posición, doblado por los líderes y únicamente por delante de quienes habían seguido su estrategia.
De esta forma, con un único punto de botín tras ganar la carrera al sprint del sábado, su ventaja en la general pasa de 26 puntos a 7 a falta de siete grandes premios, mientras que Márquez sigue acercándose tras ganar en Aragón y en Misano, a 53.
Tras la carrera, Martín no pudo hacer otra cosa que lamentarse por la estrategia elegida, y entendió que su error fue haber sido pensar más en la victoria que en el campeonato, lo que hizo que actuara por su cuenta y riesgo más que esperar al movimiento de Bagnaia en cabeza de carrera y copiarle.
“Está claro que la estrategia no fue la correcta. Hay que aprender de esto“, empezó diciendo el de Pramac. “Tenía que haber tenido más claro el seguir a Pecco. Planteé la estrategia para ganar la carrera, no pensando en el Mundial. Tenía que haber sido la de seguir a Pecco“.
El español se explayó en por qué optó por entrar, jugando un papel clave la caída de su compañero de equipo cuando marchaba tercero, aunque pronto se dio cuenta de que había errado:“Entré porque llovía. Franco Morbidelli se acababa de caer. El problema es que paró de llover. Sin salir del taller me di cuenta de que la mejor opción era quedarse en pista“.
Mientras que Bagnaia comentó que había mirado el radar de lluvia y que tenía claro que no iba a ser suficiente como para una carrera ‘Flag to Flag’, Martín confesó que no lo tenía tan claro:“No sabía muy bien qué tipo de lluvia venía. Seguramente está bien tener más información antes de la carrera“.
Sin embargo, lo sucedido no hunde a un Martín que se sigue viendo en la brecha pese al contratiempo: “Un día estás por delante en la tabla y otro, detrás. Hoy es un día de mucho aprendizaje, pero no tengo ninguna duda de que estaré en la pelea“, finalizó.