salarios impagos y filiales en quiebra

Los graves problemas financieros de KTM siguen dando que hablar en Austria. Con una deuda del fabricante que se acerca a los 3.000 millones de euros, se ha anunciado que 750 empleados perderán su empleo antes de fin de año, mientras que los salarios de noviembre y las primas de fin de año no se han pagado.

Los empleados deberían recibir el dinero que se les adeuda a través de un fondo para compensar la insolvencia de las empresas, pero KTM intentó tranquilizar a los trabajadores asegurándoles que los salarios de diciembre se pagarían por adelantado, con un 90% de la suma prevista antes de Navidad. Al final, esta promesa no se cumplió.

La Cámara de Trabajadores de Alta Austria, encargada de representar legalmente sus intereses según la legislación austriaca, anunció el viernes que, debido a su insolvencia, la empresa “aparentemente no estaba en condiciones de efectuar los pagos prometidos”, y Andreas Stangl, Presidente de la Cámara, declaró que “los apretones de manos ya no tienen ningún valor en la dirección de KTM”.

Stangl apuntó directamente a Stefan Pierer, director general de KTM. ” Sería razonable que el Sr. Pierer explicara por qué no se aplican las promesas de su empresa a los empleados”, declaró a la emisora austriaca ORF. “No es aceptable que siempre desaparezca y nos deje hacer el trabajo. Ya estamos hartos”.

“El señor Pierer ha cosechado dividendos y millones. Ahora la gente está sobreendeudada y no puede permitirse nada. Si tenemos algo de decencia, deberíamos dar a la gente su dinero para que tengan suficiente para Navidad”.

En un comunicado de prensa, los sindicatos PRO-GE y GPA se refirieron a un “golpe en la cara” de los afectados, diciendo que los empleados estaban pagando el precio de “aparentes malas decisiones de gestión”.

Stefen Pierer

Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images

Stefan Pierer se encuentra actualmente ausente. No ha hecho ninguna declaración pública desde el anuncio de las dificultades de KTM y no ha aparecido en su papel de Presidente de la Federación de Industria de Alta Austria desde principios de diciembre.

No obstante, KTM ha declarado al diario Oberösterreichische Nachrichten que el objetivo es “pagar normalmente los salarios” de diciembre, enero y febrero, mientras que la Cámara de Trabajo no podrá liberar las sumas del fondo de remuneración hasta principios de 2025.

Una situación que se deteriora antes de plazos importantes

El destino de KTM debería determinarse antes del inicio de la temporada de MotoGP. Están previstas varias audiencias judiciales en las próximas semanas, el 20 de diciembre con los acreedores y el 24 de enero para las verificaciones generales. Los acreedores deben votar sobre el plan de reestructuración propuesto el 25 de febrero.

En este contexto, la producción de motos de serie se interrumpió en Mattighoffen el viernes, una semana antes de lo previsto. Las líneas de producción permanecerán paradas durante varias semanas, con el objetivo de reiniciarlas en marzo.

Según los documentos facilitados por KTM, hay un stock de 130.000 motos por vender, cuyo destino es incierto: a partir del 1º de enero entrará en vigor la norma de emisiones Euro 5 para los vehículos de dos ruedas, y los modelos que no la cumplan ya no podrán matricularse por primera vez. Serán posibles exenciones para los “modelos al final de su vida útil”, a petición del fabricante, pero sólo para cantidades muy limitadas.

Una nueva filial de KTM, Vöcklabrucker Metallgießerei GmbH, ha sido declarada en quiebra, a pesar de haber sido adquirida por el grupo muy recientemente, en septiembre. KTM realizaba la mitad de sus ventas de diversas piezas utilizadas en la fabricación de motocicletas, y ya no se podían pagar los salarios.

Según la asociación de protección de acreedores KSV1870, las deudas de esta filial ascienden a 3,5 millones de euros y hay 134 empleados afectados. La asociación afirma que KTM debía aportar los fondos durante la parada de la producción, pero al final no pudo hacerlo.

Mientras tanto, las actividades de MotoGP se han mantenido, e incluso se ha realizado un test en Jerez esta semana a pesar de la congelación del desarrollo que se ha decidido. La situación, no obstante, está causando revuelo y empieza a preocupar al entorno de Pedro Acosta, nombrado miembro del equipo oficial para la temporada 2025.

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