Bagnaia está más cerca de lo que parece

Marc Márquez se presenta en un circuito que en el pasado le fue hostil, con la mejor inercia imaginable después de cuadrar en Aragón un fin de semana perfecto, en el que, además de un doblete en la prueba al sprint y la larga, se llevó la pole position, la vuelta rápida y lideró todas las sesiones de ensayos.

Eso refuerza su condición de líder de un campeonato que ahora comanda con 32 puntos sobre Alex, su hermano, y con 93 puntos sobre Bagnaia, el tercero. Habida cuenta de la dinámica que lleva el español desde que se enfundó el mono rojo de Ducati, pensar en un triunfo con vistas al domingo no es para nada descabellado, por más que solo se haya impuesto una vez (2014) en la categoría de las motos pesadas.

“Después de Aragón llegamos en muy buena forma. Este circuito es la casa de Ducati y la carrera de casa de mi compañero, que ha ganado las últimas tres temporadas”, recordó Márquez, en su perfil bajo de los jueves.

La velocidad que Pecco Bagnaia ha demostrado en Mugello en el pasado coloca al italiano ante una oportunidad inmejorable, puede que la última, para tratar de reengancharse a la pelea por un título que, con el avance del calendario, cada vez parece más decidido a favor de Márquez.”Ganar a Pecco aquí no es definitivo, porque el segundo en la clasificación es Alex (Márquez). No es cosa de Pecco, de Alex o de Morbidelli. Tenemos siete dobletes, y uno se puede caer y lesionarse”, subrayó el de Ducati.

El catalán tratará de aprovecharse de la libre circulación de datos dentro de Ducati para ‘birlarle’ al #63 los secretos de un circuito único. “Este año trataré de sacar partido de los datos de Pecco, y no solo los suyos; también de los de Alex, a quien esta pista le gusta mucho”, añadió el de Cervera (Lleida).

A pesar del colchón que tiene de ventaja, y de las buenas sensaciones que viajan con él, Márquez proyecta cautela, seguramente escarmentado de los errores que le llevaron a marcar dos roscos dolorosísimos, en Austin y en Jerez.

“Pecco está más cerca de lo que lo dicen los números. Pero, independientemente de si gano el noveno título o no, el principal desafío de mi carrera fue el de volver a ser competitivo después de la lesión. Y ese ya lo he conseguido. Hace tres años estaba aquí, anunciando que me tenía que ir a Estados Unidos a que me rompieran el brazo de nuevo para que me lo enderezaran”, remachó el multicampeón del mundo.