George Russell finalmente no es el ganador del Gran Premio de Bélgica. Menos de dos horas después del final de la carrera en Spa-Francorchamps, el delegado técnico de la FIA, Jo Bauer, publicó un documento que revelaba que el monoplaza del inglés pesó 1,5 kg por debajo del límite reglamentario y remitió el asunto a los comisarios de carrera.
Como era de esperar, los comisarios anunciaron la descalificación del piloto británico.
“Los comisarios escucharon al representante del equipo del coche 63 (George Russell), al delegado técnico de la FIA, al director de monoplazas de la FIA y al director técnico de monoplazas de la FIA”, comenzó el comunicado de la FIA.
“El coche 63 se pesó en las básculas interiores y exteriores de la FIA y ambas básculas mostraron el mismo resultado de 796,5 kg. La calibración de ambas básculas fue confirmada y presenciada por el competidor”.
“Durante la audiencia, el representante del equipo confirmó que la medición es correcta y que todos los procedimientos requeridos se realizaron correctamente. El equipo también reconoció que no había circunstancias atenuantes y que se trataba de un error genuino del equipo”.
“Los comisarios determinan que se ha infringido el artículo 4.1 del Reglamento Técnico de Fórmula 1 de la FIA y, por lo tanto, es necesario aplicar la sanción estándar para dicha infracción”.
La victoria fue, por tanto, para Lewis Hamilton, que había liderado la carrera durante mucho tiempo, pero que había visto cómo Russell le arrebataba el liderato gracias a una estrategia de una sola parada.
Hamilton alcanzó a su compañero de equipo en las vueltas finales, pero nunca pudo concretar un adelantamiento. El tercer éxito de Russell se convirtió así en el 105º de Hamilton, dos carreras después de la victoria del piloto más laureado de la historia en Silverstone.
Oscar Piastri se hizo con la segunda plaza, mientras que Charles Leclerc accedió al tercer puesto, seguido de Max Verstappen, Lando Norris, Carlos Sainz Jr, Sergio Pérez, Fernando Alonso y Esteban Ocon. Daniel Ricciardo entró en los puntos al clasificarse décimo.
El efecto en el campeonato de pilotos fue mínimo, ya que Verstappen se mantiene 78 puntos por delante de Norris.
En la clasificación de constructores, McLaren aumentó ligeramente su ventaja sobre Ferrari, lo que empujó a Mercedes un poco más atrás, habiendo perdido la marca alemana el que fue su primer 1-2 desde el GP de Brasil 2022.