En declaraciones realizadas a Motorsport.com en Singapur, Max Verstappen dijo que, en su opinión, lo peor ya ha pasado, y el fin de semana de carreras en Austin hasta ahora coincide perfectamente con esas palabras.
Verstappen se hizo con la pole en la clasificación sprint el viernes y fue capaz de convertirla en victoria un día después. Al hacerlo, el neerlandés sumó ocho puntos a su total en el campeonato de pilotos y, además, vio cómo Lando Norris cometía un error en los últimos compases, lo que hizo que el de McLaren cayera de segundo a tercero al ser adelantado por el Ferrari de Carlos Sainz.
Son todas buenas noticias para Verstappen, aunque el líder del Mundial prefiere mirarse a sí mismo y esa imagen también lo satisface.
“Ciertamente no ha estado mal, esto se sintió un poco como en los viejos tiempos otra vez”, concluyó el piloto de Red Bull a poco de ganar en el Circuito de las Américas.
“Estoy muy contento con lo de hoy. Si nos fijamos en la carrera en su conjunto, por supuesto Ferrari también fue muy rápido, pero al menos ahora estamos compitiendo de nuevo. En los últimos meses sólo mirábamos hacia atrás y esta vez, afortunadamente, hemos podido volver a correr por nuestra cuenta. El ritmo fue bueno”, resumió.
Eso le valió a Verstappen otro triunfo al sprint, en el que, por cierto, también es, con diferencia, el ganador récord en el tan discutido formato. “¡Eso es solo porque no me gusta tanto!”, bromeó el tricampeón.
“Estos fines de semana son siempre muy agitados. Tienes que poner el coche en la ventana adecuada enseguida, pero durante los últimos fines de semana sprint lo hemos conseguido bien y el coche ha ido bien enseguida. Así que, afortunadamente para nosotros, todo funciona bien”.
Para Verstappen, la victoria en la carrera sprint en Texas es su primera victoria en cualquier forma desde el fin de semana de Gran Premio en Austria a finales de junio, cuando el neerlandés también ganó la competencia sprint disputada en el circuito Red Bull Ring