La elección del alerón trasero de McLaren para el Gran Premio de Las Vegas siempre iba a ser interesante, porque era la primera carrera en la que ya no podía contar con su anterior solución “mini-DRS”.
La escudería de Woking había dado un golpe maestro tras el parón veraniego con la introducción de un diseño de alerón trasero flexible que cumplía plenamente con la normativa, pero que abría hábilmente la ranura bajo carga para ayudar a reducir la resistencia aerodinámica.
Tras la victoria de Oscar Piastri en el Gran Premio de Azerbaiyán con el denominado “mini-DRS”, las quejas de los rivales llevaron a la FIA a estudiar más a fondo el concepto.
Y tras las conversaciones entre el organismo rector y el equipo, McLaren acabó aceptando hacer modificaciones que contentaron a la FIA y disiparon las preocupaciones de los competidores.
Si McLaren hubiera seguido utilizando su diseño anterior, casi con toda seguridad lo habría estrenado en Las Vegas, ya que las largas rectas son el terreno perfecto para un alerón de este tipo.
Sin embargo, al no tener esa opción, McLaren ha optado por el camino más obvio: la solución de menor carga aerodinámica de la que dispone.
Se trata de un alerón que ya habíamos visto utilizar antes, ya que apareció en el coche de Lando Norrisdurante la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Italia, antes de que el equipo cambiara a la solución “mini-DRS”, entonces más óptima.
En cuanto al diseño de esta última solución de alerón trasero, presenta elementos que ocupan muy poco espacio dentro de la región de caja permitida.
Esto significa que el plano principal es más o menos plano, en lugar de tener la apariencia más generosa en forma de cuchara que suelen tener los alerones de esta generación.
Los criterios dimensionales para este plano principal más plano también implican que el borde de ataque está más retrasado de lo habitual, lo que requiere que el pilar de estilo cuello de cisne montado en el centro esté más inclinado que en sus otros diseños.
Mientras tanto, la sección de la punta se ha recortado de esquina a esquina a lo largo del borde superior, dando como resultado una superficie triangular, en lugar de las soluciones cuadradas empleadas habitualmente. También se ha ajustado el recorte de la placa final.
McLaren también ha adoptado pivotes de flaps en forma de lágrima con esta especificación de ala, en lugar de los de estilo barril utilizados en sus otros diseños.
McLaren MCL38 GP de Las Vegas, comparación con el GP de Italia
Foto: Giorgio Piola
McLaren también llegó a Las Vegas con un diseño de alerón delantero que ya habíamos visto en los entrenamientos libres del Gran Premio de Italia.
El alerón, que también presentaba una decoración modificada, tiene recortes en forma de media luna en el borde de salida del alerón superior.
Estos recortes ayudan a reducir la carga aerodinámica generada y a equilibrar el coche, de delante hacia atrás, dadas las decisiones tomadas por el equipo en la parte trasera del monoplaza.
En esta ocasión, los recortes en forma de media luna se han aumentado de tamaño, con el fin de coincidir con las decisiones tomadas en la parte trasera (flecha azul, resaltado amarillo).
Otras modificaciones del alerón delantero en Las Vegas incluyen la alteración del tamaño de la parte exterior de la aleta superior, mientras que el soporte metálico que estaba montado allí anteriormente también se ha eliminado (flechas rojas).
Este cambio puede parecer menor, pero teniendo en cuenta el emplazamiento, influirá en la deformación del alerón y de la placa final, lo que a su vez alterará el comportamiento del flujo de aire y del sistema de presión en esta región.